Add parallel Print Page Options

La viña del Señor Todopoderoso es el pueblo de Israel;
los hombres de Judá son su huerto preferido.
Él esperaba justicia,
    pero encontró ríos de sangre;
esperaba rectitud,
    pero encontró gritos de angustia.

Maldiciones contra los explotadores

¡Ay de aquellos que acaparan casa tras casa
    y se apropian de campo tras campo
hasta que no dejan lugar para nadie más,
    y terminan viviendo solos en el país!
El Señor Todopoderoso me ha dicho al oído:
    «Muchas casas quedarán desoladas,
    y no habrá quien habite las grandes mansiones.

Read full chapter